Gabigar: “Nunca fue mi aspiración ser una reina de belleza”

La cantante, compositora, modelo y fonoaudióloga Gabriela Pulgar, mejor conocida como Gabigar cuenta todo sobre su paso por Miss Chile, la elección de su carrera universitaria y repasa su trayectoria musical.

Su carrera ha dado varios vuelcos para llegar a encaminarse fuertemente en la música. En esta entrevista revisamos juntos su paso por Miss Chile, la representación de Chile en el extranjero, sus estudios de fonoaudiología y, obviamente, su proceso creativo musical.

Me gusta iniciar con esta pregunta: ¿qué es lujo para ti?

El lujo para mí es tener tiempo. Me siento muy privilegiada cuando dispongo de mi tiempo para hacer lo que me gusta: sentarme a componer una canción en el piano, compartir con mi familia sin interrupciones, meditar y salir a caminar por las mañanas o simplemente hacer mi rutina de skincare en las noches.

Tomé la decisión, durante la pandemia, de atesorar con mucha consciencia esos momentos necesarios en mi vida, poniendo muchas veces en pausa mis expectativas y cuestionar si estoy haciendo las cosas por lograr el “éxito” o el “reconocimiento” o si lo hago por sentirme plena y feliz. 

Nunca fue mi aspiración ser una “reina de belleza” ni nada parecido, tuve que trabajar en mi propio concepto de belleza y qué valor le doy, porque si no estás segura de tu norte, es muy fácil perderse en la superficialidad

¿Cómo fue tu experiencia como Miss Chile y el representar a nuestro país en el Miss Mundo?

Fue una experiencia increíble, conocí mujeres muy diversas, cada una con sus luchas y sus fortalezas, pero que hasta el día de hoy me inspiran. El proceso me enseñó mucho… Aprendí a dejar los prejuicios a un lado, a escuchar mi intuición sin importar el qué dirán y a ser disciplinada. Cambié mi vida en un par de meses y me preparé mucho para viajar a Londres, y aunque nunca fue mi aspiración ser una “reina de belleza” ni nada parecido, tuve que trabajar en mi propio concepto de belleza y qué valor le doy, porque si no estás segura de tu norte, es muy fácil perderse en la superficialidad.

Tuve que construir mi autoestima mucho más allá de mi apariencia y gracias a eso descubrí mi propósito, tuve el honor de ser nombrada Miss World Talent ese año y nunca me olvidaré de la sensación que sentí al escuchar “Chile”, cuando me llamaban para recibir el reconocimiento.

¿Crees que los programas de talento en los que participaste, fueron parte de la decisión de dedicarte a ser cantante?

No, creo que fueron intentos de probarme a mí misma que sí era lo suficientemente buena cantando o que sí valía la pena arriesgarme a mostrar mi voz. Pero creo que el hito más importante que me llevó a tomar la decisión fue cuando compuse mis primeras canciones, en especial, “Vives en la Luna”.

Cuando compuse esa canción y comencé a compartirla, todos se emocionaban, lloraban y me hacían sentir que realmente había algo especial ahí. Así que decidí grabar mi primer EP “Transparente”.

¿Hay un antes y un después de tu participación en el Festival de Viña?

Pienso que emocionalmente fue muy potente la experiencia, porque básicamente cumplí un sueño que nunca pensé que se haría realidad. Entonces me di cuenta que si trabajas por tus objetivos, por más inalcanzables que parezcan, sí se pueden lograr.

¿Qué mensaje esperas entregar con tu tema “Vives en la luna” y en quién está inspirado?

“Vives en la luna” es una canción que compuse para mi hermano Joaquín, que tiene una condición de autismo. Joaquín ya tiene 19 años y orgullosamente puedo decir que está cursando su primer año de universidad. Esta canción fue una forma de decirle a mi hermano que mi amor hacia él es incondicional y que a pesar de las dificultades para comunicarnos, siempre intentaré adaptarme y viajar a su mundo para conectar con él.

Realmente es una historia tan clara y con palabras tan sencillas, que ha resonado en muchas personas, sin siquiera imaginarlo. Por eso me llena de emoción y de orgullo haberla escrito. Espero que pronto avance la Ley de Autismo, para que las personas con TEA se sientan incluidas y respetadas en ambientes sociales y laborales, porque merecen las mismas oportunidades  de desarrollarse que nosotros.

¿Piensas que plataformas como Spotify ayudan a dar a conocer singles sin tener que tener un álbum completo?

Sí, ayudan mucho, de hecho así funcionan. La digitalización de la industria musical y la sobreoferta de canciones, hace que los músicos prácticamente estemos en una carrera de quién saca más música. Si bien creo que es muy importante como artista conocer los diversos canales y estrategias de marketing para promover tu contenido, no creo que la motivación de una carrera musical deba ser exclusivamente tener seguidores en Instagram,  aparecer en las playlist más populares de Spotify, ni tener millones de reproducciones en Youtube.

Sinceramente, para mí lo fundamental es sentirse orgullosa del trabajo que uno presenta a su audiencia, sea una canción al mes o una al año, si eres genuina en tu trabajo tu público lo sabrá.

La música y mis canciones son parte de lo que soy, pero no son todo lo que soy, porque me he dado cuenta que de esa forma mi potencial es mucho más grande y me siento más capaz de enfrentar muchas más oportunidades.

¿Piensas que es difícil desarrollarse como cantante en nuestro país?

Difícil puede ser, pero no imposible. Creo que con la mentalidad correcta, disciplina y perseverancia todo se puede lograr. Lo que trato siempre de considerar es que la música y mis canciones son parte de lo que soy, pero no son todo lo que soy.

¿Es por ello que decidiste volver de México? ¿Cómo fue la experiencia allá?

Fue una tremenda experiencia, porque salí absolutamente de mi zona de confort y me atreví a buscar nuevos horizontes para mi carrera musical. Aunque al comienzo fue difícil, tuve la oportunidad de subirme a grandes escenarios.

Viajé a Puebla, Guadalajara y Monterrey a promocionar mi música en distintos medios de comunicación. Además, justo antes de la pandemia estaba trabajando con un par de empresarios y conferencistas mexicanos, como su vocal coach, una labor que me tenía muy contenta. Pero, después de permanecer seis meses prácticamente encerrados en nuestro departamento en Ciudad de México, junto a mi pareja decidimos regresar a Chile.

Mis The Best

Película: Love Actually,  About time e Interestelar

Serie: Anne with and E

Destino: New York

Restaurant: Adhana

Plato: Parmigiana de berenjena

Trago: Michelada

Producto de Belleza: BB cream Urban decay + Máscara de pestañas

Icono de la moda: Cher

Tienda Favorita: Topshop

Accesorio infaltable: Anteojos de sol

Actriz: Meryl Streep

Deportista: Bárbara Riveros

Hobbie: Leer y cocinar

Libro: El hombre en busca de sentido

Cantante o grupo de música: Coldplay, Bob Dylan, Dua Lipa, Harry Styles y Sam Smith.



¿Cómo has vivido esta pandemia?

Ha sido intensa, ha tenido altos y bajos. Me he sentido muy ansiosa, a veces muy angustiada, pero otras veces muy fuerte y muy decidida. En términos generales, diría que he sido una privilegiada, porque he tenido mucho trabajo. Así que no me puedo quejar, pero tengo que admitir que ha sido un re descubrirme y reconocerme, y darme el tiempo para trabajar en mí.

¿Qué es lo que más has valorado?

He valorado muchísimo el tiempo que he tenido para replantearme mis prioridades, mis valores, mis pensamientos y mis hábitos. He valorado muchísimo el poder estar en contacto más cercano con mi familia  y construir mejores relaciones con la gente a mi alrededor.

Pero lo que más he valorado claramente es estar sana, sentirme bien. Creo que esa ha sido una de las mayores lecciones de esta pandemia: dejar de pensar que somos eternos e invencibles.

¿Qué dificultades ha traído para tu carrera?

La mayor dificultad ha sido no poder tocar en vivo y estar en contacto directo con mis fans, ni poder participar de festivales o entrevistas de manera presencial. Eso ha sido un gran golpe porque esos son los  momentos que te permiten conectar con tu público.

¿De qué se trata tu nuevo sencillo “La casa vacía”?

Esta canción relata una historia personal pero también entrega un mensaje a todas esas mujeres que se encuentran sometidas a violencia o vulneración, que están en una relación tóxica o quieren salir del lugar en el que están. Es un viaje sonoro hacia la melancolía.

La producción de La Casa Vacía estuvo a cargo de Nicolás Quiroga y está acompañada de un videoclip que ya se encuentra disponible en YouTube. Es una producción audiovisual en blanco y negro a cargo de la directora Lola Contreras, que me parece que con mucha sencillez evoca la emocionalidad de la canción.

¿Qué planes tienes a futuro para tu carrera?

Por ahora, terminar la producción de las canciones de mi nuevo álbum. Es un trabajo que me tiene felizmente muy ocupada y que demanda mucha energía y dedicación. Además, me gustaría seguir desarrollándome como coach vocal y entregar lo mejor de mí a mis alumnos y clientes.

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